Infodemia, deepfake, fake news… la desinformación en 10 palabras

La pandemia del covid-19 ha puesto con frecuencia en boca de expertos y también negro sobre blanco en titulares de prensa la palabra “infodemia”. ¿Qué quiere decir realmente? Otros términos vinculados a la desinformación también pueden generar dudas: deepfake, fake news, misinformation, bots, fact-checking… Seguro que muchos de ellos os han aparecido en redes sociales o mensajes de WhatsApp. ¿Queréis saber qué significan? Os ofrecemos un vocabulario imprescindible para entender la desinformación. Bajo estas líneas, 10 palabras clave para aprender a informarse:

Publicado por Learn to Check | 22.07.2020

Bots

¿Alguna vez os han aparecido en vuestras redes sociales seguidores que no conocéis y que os huelen a chamusquina? ¿Seguidores con nombres o fotos extraños, a los que sigue poca gente o que publican contenido un poco sospechoso? Pues puede que fueran bots. Los bots son seguidores falsos, cuentas de redes sociales creadas informáticamente, pero que en realidad no corresponden a ninguna persona real y que, con frecuencias, se utilizan para propaganda u otro interés.

Deepfake

Es un término técnico, pero con el que debemos familiarizarnos, ya que se pronostica que en unos años los deepfakes se incrementen. En resumen, los deepfakes o ultrafalsos, como propone la Fundeu, son contenidos falsos creados a través de inteligencia artificial. Con técnicas de síntesis, por ejemplo, se pueden mezclar dos vídeos para crear un tercero que sea falso pero que parezca realista. Si queréis poneros a prueba, os recomendamos whichfaceisreal, una página que invita a discriminar de entre dos personas, cuál existe y cuál no. La inteligencia artificial puede hacer maravillas, para bien o para mal, y parece que cuando el ojo humano se queda corto para descubrir la realidad, nos podría ayudar en un futuro otra tecnología, el blockchain, que puede certificar la procedencia de la información.

Desinformación

¿Es lo mismo que fake news? ¿Incluye bromas y manipulaciones? ¿Qué significa? En la guía Understanding Disinformation Disorder, de First Draft, organización puntera en verificación digital, se explica de forma gráfica la diferencia entre disinformation, malinformation y misinformation, unos conceptos que, en ocasiones, se confunden y que, en realidad, son tres tipos de lo que se conoce como “desorden informativo”. La desinformación designa, según First Draft, aquel “contenido deliberadamente falso diseñado para causar daño”. Són informaciones falsas creadas con el propósito de engañar para obtener un rédito político, económico, personal u otro.

Desorden informativo

Se conoce como desorden informativo o caos informativo todo aquello que contribuye a «contaminar» nuestro ecosistema informativo; los contenidos que crean confusión, engaño y que hacen que no estemos bien informados. Y esto es un problema. La información es un derecho de todos, recogido en la Declaración Universal de Derechos Humanos, y es fundamental para una sociedad democrática.

Fact-checking

Se llama así el proceso de contrastar una información de fuentes oficiales para determinar si es falsa o, por el contrario, veraz y confiable. El término se originó en la década de los 90 en los Estados Unidos para designar el proceso de averiguar si lo que los candidatos decían en sus anuncios de televisión era o no cierto. Ahora se ha extendido y se somete a análisis cualquier tipo de fuente y contenido. El fact-checking es un procedimiento que deben hacer todos los periodistas. Hay organizaciones formadas por profesionales de la información que se dedican específicamente a verificar, tanto fuentes oficiales como no oficiales, algunos se agrupan en la International Factchecking Network.

Fake news

Desinformación, infodemia, misinformation, malinformation… Mmm… Entonces, ¿a qué llamamos fake news? A los periodistas y la comunidad de expertos en desinformación no les gusta nada esta denominación. Un fake nunca puede llegar a ser noticia, ya que las noticias son informaciones veraces y contrastadas. Y una noticia no puede contener elementos deliberadamente falsos, lo dice el código deontológico de los profesionales de la información. Así, parece que fake news es una expresión que ha hecho fortuna y que pretende asociar la circulación de mentiras con los periodistas y los medios de comunicación para desprestigiarlos.

Infodemia

La Organización Mundial de la Salud (OMS) hace uso de esta palabra con asiduidad durante la pandemia mundial de covid-19 en 2020. La voz inglesa infodemic y la traducción española infodemia se refieren a un exceso de información –correcta y falsa- que se expande muchísimo en un corto período de tiempo –al igual que lo hacen los virus-. Se trata en definitiva de una epidemia de información”, como la define la Organización Panamericana de la Salud. La consecuencia más grave es que con todo este remolino de datos es difícil discriminar la información valiosa y útil cuando la necesitamos. Si habéis sentido esta sensación con la pandemia del coronavirus, aquí os dejamos un enlace que os puede ayudar: hechos demostrados y mentiras perniciosas recopiladas por la propia OMS durante la pandemia.

Malinformation

Es información creada para perjudicar a alguien; puede ser verdadera o falsa, pero la característica esencial es esta intención de dañar el honor, la reputación o la carrera profesional de una persona.

Tipos de desinformación

Fuente: First Draft

Misinformation

Se conoce como misinformation, una palabra para la cual no hay una traducción española aceptada, aquella información que es falsa pero la persona que la disemina cree que es correcta. La diferencia, pues, entre disinformation y misinformation radica en la intención. Si cuando hablábamos de desinformación hacemos referencia a información intencionadamente falsa; cuando se trata de misinformation, los bulos se transmiten “sin querer”, como se diría en lenguaje popular. Son falsedades que circulan por la incapacidad de las personas que los retuitean o reenvían de reconocer bulos o verificar información. También entran en la categoría de misinformation los errores periodísticos o de otras fuentes de información o los artículos de webs satíricas que se interpretan como noticias.

Verificación

Igual que existen contenidos, herramientas y personas que pretenden engañar, también los hay con intenciones más nobles. En el contexto en el que nos encontramos, la verificación comporta comprobar si es falsa o veraz una información que procede de fuentes no oficiales, como la que circula por redes sociales. Desde 2010, con las protestas en países árabes para reclamar mejoras, conocidas como la Primavera Árabe, se ha puesto de manifiesto la necesidad que periodistas y ciudadanos se instruyan en verificación digital.

No hay comentarios

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Acepto la política de privacidad y el aviso legal